martes, 24 de enero de 2012

Contaminación del aire

La contaminación del aire es la que se produce como consecuencia de la emisión de sustancias tóxicas. Puede causar trastornos tales como ardor en los ojos y en la nariz, irritación y picazón de la garganta y problemas respiratorios. Bajo determinadas circunstancias, algunas substancias químicas que se hallan en el aire contaminado pueden producir cáncer, malformaciones congénitas, daños cerebrales y trastornos del sistema nervioso, así como lesiones pulmonares y de las vías respiratorias. A determinado nivel de concentración y después de cierto tiempo de exposición, ciertos contaminantes del aire son sumamente peligrosos y pueden causar serios trastornos e incluso la muerte.

La polución del aire también provoca daños en el medio ambiente, habiendo afectado la flora arbórea, la fauna y los lagos. La contaminación también ha reducido el espesor de la capa de ozono. Además, produce el deterioro de edificios, monumentos, estatuas y otras estructuras.

La contaminación del aire también es causante de neblina, la cual reduce la visibilidad en los parques nacionales y otros lugares y, en ocasiones, constituye un obstáculo para la aviación.

                                 Contaminantes del aire                            

 Monóxido de Carbono (CO): Es un gas inodoro e incoloro. Cuando se lo inhala, sus moléculas ingresan al torrente sanguíneo, donde inhiben la distribución del oxígeno. En bajas concentraciones produce mareos, jaqueca y fatiga, mientras que en concentraciones mayores puede ser fatal.
El monóxido de carbono se produce como consecuencia de la combustión incompleta de combustibles a base de carbono, tales como la gasolina, el petróleo y la leña, y de la de productos naturales y sintéticos, como por ejemplo el humo de cigarrillos.

Dióxido de Carbono (CO2): Es el principal gas causante del efecto invernadero. Se origina a partir de la combustión de carbón, petróleo y gas natural. En estado líquido o sólido produce quemaduras, congelación de tejidos y ceguera. La inhalación es tóxica si se encuentra en altas concentraciones, pudiendo causar incremento del ritmo respiratorio, desvanecimiento e incluso la muerte.

Clorofluorcarbonos (CFC): Son sustancias químicas que se utilizan en gran cantidad en la industria, en sistemas de refrigeración y aire acondicionado y en la elaboración de bienes de consumo. Cuando son liberados a la atmósfera, ascienden hasta la estratosfera. Una vez allí, los CFC producen reacciones químicas que dan lugar a la reducción de la capa de ozono que protege la superficie de la Tierra de los rayos solares. La reducción de las emisiones de CFC y la suspensión de la producción de productos químicos que destruyen la capa de ozono constituyen pasos fundamentales para la preservación de la estratosfera.


Contaminantes atmosféricos peligrosos (HAP): Son compuestos químicos que afectan la salud y el medio ambiente. Las emanaciones masivas –como el desastre que tuvo lugar en una fábrica de agroquímicos en Bhopal, India– pueden causar cáncer, malformaciones congénitas, trastornos del sistema nervioso y hasta la muerte.
Las emisiones de HAP provienen de fuentes tales como fábricas de productos químicos, productos para limpieza en seco, imprentas y vehículos (automóviles, camiones, autobuses y aviones).

Ozono (O3): Este gas es una variedad de oxígeno, que, a diferencia de éste, contiene tres átomos de oxígeno en lugar de dos.El ozono produce irritación del tracto respiratorio, dolor en el pecho, tos persistente, incapacidad de respirar profundamente y un aumento de la propensión a contraer infecciones pulmonares. A nivel de medio ambiente, es perjudicial para los árboles y reduce la visibilidad.

Oxido de nitrógeno (NOx): Proviene de la combustión de la gasolina, el carbón y otros combustibles. Es uno de los principales causas del smog y la lluvia ácida.

Partículas: En esta categoría se incluye todo tipo de materia sólida en suspensión en forma de humo, polvo y vapores. Además, de reducir la visibilidad y la cubierta del suelo, la inhalación de estas partículas microscópicas, que se alojan en el tejido pulmonar, es causante de diversas enfermedades respiratorias. Las partículas en suspensión también son las principales causantes de la neblina, la cual reduce la visibilidad.

Dióxido de azufre (SO2): Es un gas inodoro cuando se halla en bajas concentraciones, pero en alta concentración despide un olor muy fuerte. Se produce por la combustión de carbón, especialmente en usinas térmicas. También proviene de ciertos procesos industriales, tales como la fabricación de papel y la fundición de metales. Al igual que los óxidos de nitrógeno, el dióxido de azufre es uno de los principales causantes del smog y la lluvia ácida.


                 Prevención de la contaminación del aire                
Hay muchas formas de ayudar a reducir la contaminación del aire. Se puede hacer un aporte significativo a la purificación del aire simplemente siguiendo (o no, según sea el caso) ciertas prácticas sencillas

Dado que los vehículos contribuyen enormemente a la polución del aire mediante la emisión de CO2, NOx, ozono, VOC, HAP, CFC y partículas volátiles, la modificación de los hábitos de conducción contribuirá a reducir la misma.

Reducir el uso del automóvil, usar medios de transporte público o bicicleta, caminar más, utilizar el automóvil como medio de transporte colectivo, etc. constituyen la mejor manera de ayudar a reducir la polución atmosférica.


               Efectos negativos de la contaminación del aire             
Muchos estudios han demostrado enlaces entre la contaminación y los efectos para la salud. Los aumentos en la contaminación del aire se han ligado a quebranto en la función pulmonar y aumentos en los ataques cardíacos. Niveles altos de contaminación atmosférica según el Índice de Calidad del Aire de la Agencia de Protección del Ambiente (EPA, por sus siglas en inglés) perjudican directamente a personas que padecen asma y otros tipos de enfermedad pulmonar o cardíaca. La calidad general del aire ha mejorado en los 20 últimos años pero las zonas urbanas son aún motivo de preocupación. Los ancianos y los niños son especialmente vulnerables a los efectos de la contaminación del aire.

El nivel de riesgo depende de varios factores:

* La cantidad de contaminación en el aire
* La cantidad de aire que respiramos en un momento dado
* La salud general

Otras maneras menos directas en que las personas están expuestas a los contaminantes del aire son:

* El consumo de productos alimenticios contaminados con sustancias tóxicas del aire que se han depositado donde crecen
* Consumo de agua contaminada con sustancias del aire
* Ingestión de suelo contaminado 
* Contacto con suelo, polvo o agua contaminados



 

martes, 17 de enero de 2012

Sostenibilidad

En ecología, sostenibilidad o bien sustentabilidad describe cómo los sistemas biológicos se mantienen diversos y productivos con el transcurso del tiempo. Se refiere al equilibrio de una especie con los recursos de su entorno. Por extensión se aplica a la explotación de un recurso por debajo del límite de renovación del mismo. Desde la perspectiva de la prosperidad humana y según el Informe Brundtland de 1987, la sostenibilidad consiste en satisfacer las necesidades de la actual generación sin sacrificar la capacidad de futuras generaciones de satisfacer sus propias necesidades.
Un ejemplo típico es el uso de la madera proveniente de un bosque: si la tala es excesiva el bosque desaparece; si se usa la madera por debajo de un cierto límite siempre hay madera disponible. En el último caso la explotación del bosque es sostenible o sustentable. Otros ejemplos de recursos que pueden ser sostenibles o dejar de serlo, dependiendo en su tasa de explotación, son el agua, el suelo fértil o la pesca.
Cuando se excede el límite de la sostenibilidad, es más fácil seguir aumentando la insostenibilidad que volver a ella.
 
 Sostenibilidad y Medio Ambiente

Los ecosistemas saludables proporcionan bienes y servicios a los seres humanos y a otros organismos. Hay dos formas principales de reducir el impacto humano negativo y de potenciar los servicios de los ecosistemas:
a) Manejo ambiental. Esta táctica directa emplea principalmente la información obtenida de las ciencias de la tierra, ciencias ambientales y de biología de la conservación. Sin embargo, este manejo es el punto final de una serie de factores causales iniciados por el consumo humano. Otra táctica se basa en el manejo de la demanda de los recursos.
b) Manejo del consumo de recursos por los seres humanos, una táctica indirecta se basa principalmente en información obtenida por las ciencias económicas.

Explosión Demográfica

Explosión demográfica es el aumento elevado y repentino de la población de seres humanos. ES frecuentemente asociada a avances tecnológicos, teniendo la mayor de ellas ocurrido el siglo XX de la era cristiana. 
El aumento brusco de la población lleva a un aumento también brusco del territorio ocupado, y tiene algunos efectos ambientales y económico-sociales catastróficos, de ahí la comparación con una explosión.  

Las explosiones demográficas son observadas en dos situaciones:
•la introducción de nuevas tecnologías que reduzcan la mortalidad (aumento en la producción de alimentos o cura de enfermedades importantes);
•en periodos de guerra o grandes calamidades, en que la supervivencia de la sociedad está amenazada, se registra importantes aumentos de las tasas de natalidad. En este caso, la "explosión" también es llamada baby boom.
Antes de la Era Contemporánea, no era común la cuenta poblacional, pero los investigadores saben con relativa certeza que hubo algunas explosiones demográficas en ciertos puntos del globo:
•con la Revolución Agrícola, en la transición del periodo Paleolítico para el Neolítico(c. 8000 a.C.);
•el descubrimiento de la metalurgia, en la Edad de los metales (c. 3500 a.C.), que dio inicio a la Revolución Urbana;
•durante la Edad Media europea (siglo XI), con la introducción de nuevas técnicas agrícolas que sostuvieron el aumento del comercio y de las ciudades.
Todos estos cambios están relacionados al aumento de la productividad agrícola, y por lo tanto a la mayor oferta de alimentos. Es bien sabido que el ser humano, cuando este bien alimentado, tiene el sistema inmunológico fortalecido, resistiendo mejor lasenfermedades y viviendo por más tiempo. Como la tasa de natalidad, regida por otros factores, se mantiene estable, el resultado es el aumento del número de seres humanos vivos. 


Pero, hasta el siglo XIX, la mortalidad aún era extremadamente elevada para los patrones actuales, pues la humanidad no... 

La desaparición de la isla de Pascua

La isla de Pascua es uno de los lugares más enigmáticos del planeta. Se encuentra a 3526 km de Chile y a 4251 km de Tahití. Quizá lo más conocido generalmente de este lugar sean los moái, las figuras enormes que pueblan la isla.

Cuando la civilización de los Rapa Nui se asentó en la isla, desarrolló una estructura social organizada, con pastores religiosos y una dieta basada, sobre todo, en el consumo de delfines.
La madera de los árboles era importante para ellos, no solo porque era fundamental para construir las canoas que les permitían tener acceso a los delfines, sino también porque la utilizaban para trasladar los moáis, ya que de ellos obtenían el material necesario para elaborar cuerda.
Sin embargo, llegó un momento en que los árboles empezaron a agotarse, y según los análisis de polen, alrededor de los años 1200 y 1500 comenzó una deforestación masiva. Por supuesto, tuvo consecuencias muy graves. Los rapa nui no tenían madera y tuvieron que abandonar el traslado y la construcción de los moái. Además, tampoco podían hacer canoas, por lo que el consumo de delfines bajó enormemente, como demuestran los hallazgos arqueológicos: los huesos de delfín son sustituidos por huesos de aves migratorias y otros animales.
La situación se volvió grave, los habitantes tenían hambre y esto ocasionó luchas entre ellos, dando lugar a un alto nivel de mortalidad.